Esta semana leemos “La vaca que puso un huevo” de Andy Cutbill e ilustrado Russell Ayto y editado por Edición SerreS.
Argumento de “La vaca que puso un huevo”
En “La vaca que puso un huevo” conocemos a Macarena, una vaca con poca autoestima que piensa que no sirve para nada.
Por suerte tiene unas grandes amigas, las gallinas, que se juntan para idear un plan para que Macarena se sienta única y especial.
Así que una mañana al despertarse encuentra que ha puesto un huevo. Eso convierte a Macarena en el centro de atención pero también en el centro de envidia de las otras vacas que no se creen que ella haya puesto ese huevo.
Mi opinión sobre “La vaca que puso un huevo”
Se trata de un cuento que seguro que encantará a niños de entre 4 a 6 años y que es divertidísimo.
Se trata de una historia muy divertida y un poco loca, pero precisamente esto es lo que más me ha gustado de la historia.
Macarena realmente se cree que ha puesto ella misma el huevo y lo cuida con todo el amor que una madre le puede dar dándole igual lo que piensen las demás vacas.
Todas estas escenas son surrealistas pero muy divertidas y mi hija se tronchaba viendo como la vaca iba paseando al huevo.
Las ilustraciones son una pasada, con montones de detalles y captan totalmente la atención de los niños.
Los personajes son muy expresivos y sus gestos y posturas transmiten totalmente lo que nos explica el texto de la historia.
Además hay momentos que pienso que están pensados más para conseguir la sonrisa de los padres que de los niños como cuando las vacas están en la peluquería todas envidiosas mirando en el periódico la noticia de Macarena.
Es un cuento ideal para leer en voz alta porque además juega con negritas, mayúsculas y diferentes tamaños para dar más o menos intensidad a cada momento.
El cuento puede parecer una locura con situaciones muy disparatadas y sinceramente sólo por lo que te hace reír me parece un cuento chulísimo.
Valores en “La vaca que puso un huevo”
En la historia podemos encontrar muchas emociones y valores con las que seguro que todos nos podremos identificar.
Lo primero que podemos ver es como Macarena tiene un problema de autoestima.
Macarena no se valora nada, ella misma dice: «no valgo ni un comino«.
Por suerte Macarena cuenta con un gran apoyo como son las gallinas. Pese a no parecerse en nada con ella son grandes amigas suyas y le apoyaran hasta el final.
Otro valor muy importante es el de la amistad, las gallinas ven a su amiga con poca confianza y deciden hacer algo que le haga sentir especial.
La apoyan y se alegran por ella cuando consigue toda la atención.
Incluso la defienden delante de las otras vacas cuando acusan a Margarita de que ella no ha puesto el huevo sino las gallinas, a pesar que saben que las otras vacas tienen razón.
Demuestran que a pesar de las diferencias que pueden haber entre ellas (son diferentes especies) son amigas de verdad de Margarita.
Mi hija está en una edad que empieza a diferenciar lo que son amigos de lo que son compañeros.
A veces los adultos llamamos amigos a todos sus compañeros y no es así. Por eso me gusta que vea que los amigos son los que te apoyan y se preocupan por ti y no siempre tienen que ser como tú.
Sinceramente nunca me ha gustado la ligereza con la que se utiliza la palabra “amig@”.
En este cuento podemos ver la empatía y las ganas de ayudar a los demás sin esperar nada a cambio.
En contraposición con la amistad podremos ver también la envidia. Las otras vacas que hasta el momento eran las estrellas del lugar, que hacían cosas tan extraordinarias ven que de repente sus habilidades no son tan especiales.
En vez de alegrarse por Margarita sienten mucha envidia y la acusan de ser una mentirosa.
También quiero destacar el tema de la diversidad y ser diferente.
En este caso Margarita tiene baja la autoestima porque es diferente a las otras vacas y no es capaz de ver todas las cosas buenas que sí es capaz de hacer.
Es un cuento que trata de una forma muy divertida y haciéndonos reír temas que me parecen muy importantes para transmitir a los más pequeños.
Finalmente, como madre os tengo que decir que el final del cuento me emociona y me hace sentir muy identificada.
Como os imagináis cuando por fin se abre el huevo sale un pequeño polluelo.
Pero cuando las vacas ya acusan a Margarita totalmente de su engaño el pequeño polluelo les contesta con un MUUUUUUUU!!!!
Y Margarita sin mirar nada más coge a su bebé con todo el amor del mundo aunque desde fuera veamos lo diferente que es de ella.
Para mí no se puede expresar de mejor manera lo que significa ser madre.
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